Henriette Gröll (1906 - 1996) fue una pintora francesa. Perteneciente a una familia burguesa de Grenoble, se casó con el arquitecto, escritor Pierre Dalioz y fundador de uno de los grupos maquis de la resistencia francesa durante la invasión nazi. Henriette era nieta de Eugénie Gruyer-Brielman, que le inculcó el interés por el arte.
Las pinturas de Gröll se caracterizan por el empleo del color y la delicadeza en la realización. Pintó retrato, abundantes naturalezas muertas y, en menor medida, paisajes. Se la considera, junto a Marie Laurencin y Suzanne Valadon, una de las pocas pintoras destacadas dentro del panorama de la pintura moderna francesa.
una chica en la ventana
mujer con kimono azul
muchacha tahitiana con flores
naturaleza muerta con flores y frutas
peonias en florero azul
paisaje dauphinois