PAUL GAUGUIN - ANNAH LA JAVANESA



Autor: Paul Gauguin (1848-1903)
Título: Annah la javanesa-Aita Parari te Tamari Vahine Judith
Técnica: Óleo sobre lienzo
Tamaño: 116 cm x 81 cm
Año: 1894
Ubicación: Colección privada
La cantante de ópera Nina Pack quería tener una sirvienta negrita (según sus propias palabras) y le consiguieron a una chica mestiza (malaya e india) en la estación de París. La cantante le puso como nombre Annah Martin, a la que conocían como Annah la javanesa. Pack se cansó de ella y la echó. Annah buscó nuevo tra-bajo y se lo pidió a Ambrose Voilland, marchante de Gauguin. Voilland la mandó con el pintor para posar como modelo. De modelo pasó a ser la compañera de Gauguin que le regaló un mono llamado Taoa. La pareja se mudó de París a Pont-Aven y Gauguin se rompió una pierna peleando con unos marineros que se burlaron de él, de Annah y el mono. Poco después, Annah regresó a París y se llevó todo lo que encontró en el departamento, excepto unos cuadros que estaban colgados en las paredes. No se supo más de ella. Esto ocurrió en 1894. En el mismo tiempo, tal vez, usando una fotografía de Annah vestida, Gauguin pintó este cuadro en el que la muestra con el mono, símbolo tahitiano de la promiscuidad. A la derecha, arriba, hay una incripción que alude a la virginidad de Judith, hijastra del músico y vecino de Gauguin, William Molard. Judith tenía trece años y se enamoró del pintor. Este la quiso pintar pero la madre de Judith se opuso, de modo que Gauguin solamente le dio lecciones de pintura. Esta relación es puesta por Gauguin en el cuadro de una manera que resulta bastante extraña ya que la virginidad de Judith forma parte del título alternativo de una pintura sobre Annah: "Aita Parari te Tamari Vahine Judith" que, en tahitiano significa (en forma aproximada): "La pequeña Judith aún es virgen".